La medicina romana, estaba muy atrasada con respecto a la griega, imponiéndose esta en la práctica en todo el imperio. De hecho, en los primeros siglos, los médicos eran de procedencia helénica, la lengua, los textos científicos, así como los centros del conocimiento pertenecían al mundo griego. La exposición muestra los avanzados conocimientos que se tenían en esta época sobre los tratamientos y la cirugía, modelos que perdurarían invariables hasta épocas muy recientes.